Con una voz muy peculiar y una forma de vivir la naturaleza única y totalmente apasionante, Félix fue el encargado de trasmitir a toda una generación, la maravillosa esencia, el lado más salvaje y desconocido de un mundo poco explotado.
Félix era Médico especialista en estomatología de formación. Fue su pasión, la cetrería, la que le llevó a colaborar en algunos programas televisivos y acabó dirigiendo series como Fauna (1968), Animalia (1969), Vida salvaje (1970), Planeta azul (1970-1974) y el inolvidable El hombre y la Tierra (1974-1980).
Su gran implicación para con la naturaleza, le llevó a promover ideales conservacionistas a través de ADENA (Asociación para la Defensa de la Naturaleza) y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
A destacar su importante labor en la preservación de especies de grandes mamíferos ibéricos en peligro de extinción, como el lobo y el lince ibérico, el oso pardo cantábrico y el muflón.
Félix falleció en un aparatoso accidente de avión en Alaska cuando realizaba un programa para televisión.
Hoy amigo Félix, nuestro pequeño homenaje va para ti.