Si queremos y necesitamos una espalda sana, un buen descanso es imprescindible, porque la condición necesaria (aunque no suficiente) para que nuestra columna vertebral encuentre preparada para afrontar el día a día es la perfecta alineación de las vértebras durante el descanso.
Y es que, efectivamente discos intervertebrales, son unas pequeñas almohadillas protectoras de la columna vertebral, que funcionan como amortiguadores naturales. Este sistema elástico, absorbe los impactos que puedan sufrir las vértebras, todo ello gracias a que en su interior se encuentra el líquido intervertebral, de tipo cartilaginoso y flexible, que se va liberando y hace que los movimientos sean suaves para nuestra columna.
A lo largo de la jornada, estas estructuras van liberando la sustancia protectora, y cumpliendo su función de amortiguación. Durante el descanso, cuando la espalda encuentra una superficie de apoyo y reposa en posición horizontal, se recupera el líquido amortiguador. La alineación de la columna es fundamental para esta proceso se complete con éxito cada noche, es por ello que el equipo de descanso juega un papel fundamental. La espalda debe reposar en una superficie libre de deformaciones, recta y que no haga a la espalda adoptar posiciones antinaturales; pero recto no es sinónimo de rigidez, es por ello que además la curva original de la espina dorsal debe mantenerse a lo largo de la noche, por eso además, la superficie de descanso debe ser flexible y adaptable.
También durante el día, debido a nuestras hábitos, sobreesfuerzos o simplemente por el trabajo rutinario, estamos expuestos a posibles dolores y lesiones que debemos y en algunas ocasiones podemos prevenir. Y la mejor forma de hacerlo es eligiendo de un buen sistema de descanso como los que te ofrecemos en Grupo Lo Monaco, es decir, un buen colchón, una buena almohada y una base adecuada a nuestras necesidades.